Se dice que no hay bendición más grande que la de un hijo y los muñecos asesinos no son la excepción. Fruto del delirante amor entre Chucky y su novia Tiffany, el pequeño Glen ha crecido en la orfandad, empleado como muñeco de ventrílocuo y preguntándose quiénes son sus padres.
Cuando un estudio fílmico se da a la producción de una cinta inspirada por la leyenda de Chucky y Tiffany, Glen se dirige a Hollywood, donde se las ingenia para devolverles la vida a ambos.
Sin embargo, mientras que sus padres se embarcan en una nueva ola de brutales y sangrientos asesinatos, su sensible hijo sólo quiere ayudarlos a dejar atrás el crimen... Y esa es tan sólo la primera de las muchas sorpresas que la paternidad les ha deparado a estos diabólicos muñecos. |