Cuando Vincent Parry escapa de la cárcel de San Quintín recibe la inesperada ayuda de una misteriosa chica; su lucha será demostrar que la condena por la muerte de su esposa es injusta.
Sin embargo, su rostro aparece en la portada de todos los diarios y deberá someterse a una cirugía plástica clandestina para poder volver a caminar por las calles de San Francisco. Una vez ahí, pronto descubrirá un sucio juego lleno de personajes torcidos que harán lo posible por quitarlo de en medio.
Dark Passage es un excelente exponente del cine negro, complementado por la sólida presencia protagónica la pareja Bogart-Bacall y una serie de secundarios notables (ojo con Agnes Moorehead, Endora en la serie La Hechizada, como la amiga chismosa y desequilibrada).
Además, resulta imposible pasar por alto la innovadora técnica de la cámara en primera persona que ocupa el primer tercio del filme, ocultándonos el rostro de Parry para brindar un ambiente asfixiante muy adecuado para la oscuridad del relato. |