Un joven idealista llamado Vitín Luna, que se desempeña como subalterno militar, busca ser oficial en el futuro. Cree que la mejor forma de llegar a lograr su meta es ir al lugar más peligroso y va, como parte de una patrulla a Chuspi, un pequeño poblado dominado por Sendero Luminoso. Si sale bien de ahí, sin duda logrará entrar a la Escuela de Oficiales.
Los ideales de Luna se irán yendo al hoyo, más cuando el nuevo teniente, Iván Roca, llega en reemplazo del anterior y tiene un estilo muy duro para dirigir el personal a su cargo.
El final es totalmente impredecible. La escena final en la que Luna y Roca se enfrentan boca a boca, pistola a pistola, es memorable, una de las mejores del cine peruano. |