Alan Hackman es el mejor ejecutor de un negocio, que consiste en implantar un chip en las personas. Cuando la gente muere este chip que ha grabado toda la vida de esas personas, puede proyectar una especie de película con este contenido, durante el funeral.
Hay quienes están en contra de esta diversión de las altas clases y creen que los recuerdos deben desvanecerse gradualmente.
Su talento para ver la vida sin ningún tipo de emoción lo ha convertido en un hombre distante, incapaz de experimentar la propia vida en primera persona.
Un día montando una rememoria para un alto ejecutivo de la empresa donde trabaja, Alan descubre una imagen de su propia infancia que lo ha atormentado toda su vida. Este hallazgo hace que replantee su existencia tal cual él es y empiece a buscar la redención. |