Años después de la ola de terror que vivió una pequeña comunidad de Texas, el asesino de la mano de Dios, así es como se hace llamar, ha vuelto dejando en su camino un rastro de miedo y muerte que deja perplejo hasta el peor asesino de todos los tiempos.
Convencido de que él sabe la identidad del asesino, Fenton Meiks, se presenta en la oficina central del FBI, con la intención de acabar con el cruel asesino y revelar los siniestros secretos que su familia ha mantenido oculto por años. |