Tras realizar un atraco en el que han muerto dos personas, Ben Harper regresa a su casa y esconde el botín confiando el secreto a sus hijos.
La policía lo detiene, pero antes de ser ajusticiado, comparte la celda con Harry Powell y en sueños habla del dinero. Tras su liberación Powell acude al pueblo de Harper obsesionado por hacerse con el botín, enamora a su viuda y consigue casarse con ella. |